lunes, 28 de febrero de 2011

Amar nunca es perder

Con tu cuerpo pierdo cordura,
saboreando en mi mente,
el momento dulce eterno,
de hacerte el amor,
en el presente.
Y con boca llena digo,
que el deseo creo mútuo,
pués tus besos me devoran el alma,
sin disfraz ni disimulo.
En el sentir como en el querer,
amar nunca es perder.
Siempre es crecer.
Si siempre pienso que,
el tu es un mi
que se llega a comprender.



lunes, 21 de febrero de 2011

Mi guerra

Es esa fina línea del deseo
la que nos llena de fantasmas.
La que nos dice que no somos
ni guapos,
ni esbeltos,
ni dulces...
sólo quizás, tomas falsas.
La que piensa que tú piensas, 
que no soy suficiente
y que tus ojos te engañan 
cuando me miras con tu lente.
La que duda de si misma,
porque te empieza a querer.
Juré no volverlo a hacer
y perdí contra el destino,
que me hace,
de nuevo, enmudecer.
Ya ves,
seguro que estás pensado
que es una tontería.
Pero las líneas de fuego se cruzan
y aunque nadie quiere morir
será el amor quien decida,
si hoy, debo dejarte vivir.












domingo, 13 de febrero de 2011

Tus besos

Ya abrí mis pedacitos
para escribir tus besos.
Aquellos que imaginas
aunque nunca me hayas hecho.
Los que quizás sueñes esta noche
y mañana 
y pasado.
El deseo, no entiende de tiempo.
Puede que esa sea mi ilusión
y no tú realidad constante.
La imaginación puede dar
a veces,
imágenes irreales.
Y me escondo tras sus muros,
donde me siento protegida.
Pensar que tu me piensas,
puede que sea vanidad
en el mundo que nos mira.
Te quiero recordar,
que aunque no se dibujar,
ni tocar melodías,
serán mis besos la canción
de todas tus poesías,
si tú las quieres cantar.
Te invito a ello.
A que los puedas probar.




























lunes, 7 de febrero de 2011

Recordar es un tormento

Quiero que seas mi día
pues mi noche, ya no te olvida.
No logro conciliar el sueño,
que me permita descansar
y salir de airoso dueño 
que me deje olvidar
que tú nunca fuiste mía,
como yo quise imaginar.
Sólo de ver tus ojos,
me pierdo en el recuerdo
que mi mente ha creado.
Cruel es el castigo 
de enfrentarme a mi mismo
sin tenerte aquí a mi lado.
Y no sé que más decirte,
pues me sobran las palabras
y me faltan los hechos.
Aquellos que me atormentan
por no haber retenido,
lo que pensé en propiedad
y sólo fue un espejismo
de mi cruda realidad.